En el mes de diciembre y todos los años desde la Edad Media hasta nuestros días, existe una tradición que diversas naciones celebran sobre todo los niños, en los cuáles hay mayor influencia, la creencia y hasta la conmemoración de la persona de San Nicolás.
Pero ¿quien es este anciano gordo, que se aparece en las casas, según la tradición, a dejar regalos a los niños, mientras ellos duermen? Porque este es el cuento que muchos niños conocen, incluso la práctica de esta tradición llega a familias de religión protestante.
San Nicolás es adorado como patrón en los siguientes lugares: Rusia; Nápoles y Sicilia, Italia; Campen, Holanda; Freiburg en Suiza; Lorena; la diócesis de Liège; también en ciudades de Alemania, Austria y Bélgica.
Es un personaje inspirado en un obispo católico de origen griego llamado Nicolás, que vivió en el siglo IV en Anatolia, en los valles de Licia (en la actual Turquía). La denominaciones de este personaje van conforme a las regiones del mundo como Papa Noel en Europa y Rusia, Santa Claus en países de habla inglesa y San Nicolás en países latinoamericanos e hispanos.
Según la tradición católica, después de su muerte el 6 de diciembre, de 345 o 352, creció su devoción y aumentaron los reportes de sus milagros. Se convirtió en el patrón de los niños y marineros. En el siglo VI, el emperador Justiniano construyó una iglesia en Constantinopla en su honor. Su popularidad en esa ciudad (hoy día Estambul) se propagó por todo el catolicismo.
La creencia parte de que San Nicolás resucitó a tres niños que habían sido asesinados y desechados en un barril de sal. Las antiguas leyendas de los niños y los regalos por la chimenea y las medias dieron lugar en Alemania, suiza y los países bajos a la costumbre de que San Nicolás trae secretamente regalos para los niños el 6 de diciembre, día en que la iglesia celebra su fiesta. Dicha costumbre fue popularizada en los Estados Unidos por los protestantes holandeses de Nueva Ámsterdam, que convirtieron al santo "papista" en un mago nórdico.
Así, el mito actual cuenta que Santa Claus se mudó al polo norte junto a la señora Claus y una gran cantidad de duendes navideños, que le ayudan en la fabricación de los juguetes y otros regalos que le piden los niños a través de cartas.
Para poder transportar los regalos, Santa Claus los guardaría en un saco mágico y los repartiría a las 00:00h del día 25 de diciembre, en un trineo mágico volador, tirado por «renos navideños», liderados por Rodolfo (Rudolph); un reno que ilumina el camino con su nariz roja y brillante, siendo el último en agregarse a la historia. Santa Claus podría entrar a los hogares de los niños, al transformarse en una especie de humo mágico; y así entrar por la chimenea u otro orificio de las casas; si éstas no disponen de una.
La directiva de la empresa Coca Cola decidió crear una publicidad navideña entorno a Santa Claus, así que crearon una campaña publicitaria donde Santa estaría recibiendo peticiones de niños en varios puntos comerciales de la ciudad. Y aunque esta campaña fue exitosa. La empresa pidió al pintor de Chicago (pero de origen sueco) Habdon Sundblom que remodelara el Santa Claus.
El personaje estrenó su nueva imagen, con gran éxito, en la campaña de Coca-Cola de 1931, usando el color rojo, negro y blanco de la marca de la gaseosa, y el pintor siguió haciendo retoques entre 1931 y 1966 que fueron reproducidos en todas las campañas navideñas que Coca-Cola realizó en el mundo, y tras la muerte del pintor en 1976, su obra ha seguido difundiéndose constantemente. Hoy día, "Santa Claus" se utiliza para vender toda clase de cosas. Es por esto que Santa Claus lleva estos colores.
Como pueden observar hermanos, estas prácticas son totalmente paganas, llenas de mentiras comerciales y psicológicas. Un mito parecido al del niño Jesús, la cual, todos sabemos que nuestro Señor y Salvador no es un niño y que tenemos que celebrar su redención. Es bueno regalarle juguetes adecuados a los niños y que sepan que son sus padres, familiares y amigos. No crearle estas falsas imágenes que son nada más que actos de hechicería para que los niños se idioticen y se conviertan en consumidores del mercado mundial.
La Navidad y todo su contenido fueron inventados por el hombre a través de la religión y el materialismo. No se debe caer en estas vanidades que simplemente no representan nada del gozo de Dios ni de las bendiciones que el Señor nos tiene como hijos para la salud, la prosperidad y sobretodo la paz, cuyos frutos están originados por el amor. Bendiciones a ustedes en el nombre de Yahshua Ha Mashiaj.
