LA IGLESIA DE PÉRGAMO. ¿EXISTEN PERSONAS COMPLACIENTES DEL ENGAÑO Y LA AMBICIÓN DENTRO DE LAS CONGREGACIONES?

Citando la poderosa Palabra de Dios en el libro de Apocalipsis 2, 12-17, en la cual está escrito: “Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: el que tiene la espada aguda de dos filos dice esto: yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás. Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los que retienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación, y también tienes a los que retienen la doctrina de los nicolaítas, la que yo aborrezco. Por tanto, arrepiéntete; pues si no, vendré a ti pronto, y pelearé contra ellos con la espada de mi boca. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe”.
El mensaje de este artículo tiene que ver con las características del creyente Pérgamo que hoy en día se ve mucho en las congregaciones.
En el siglo I, cuando el imperio romano, Pérgamo era una ciudad al norte de Esmirna, en el cual se edificó el gran altar de Zeus, llamado también el gran altar de Pérgamo, que consistía en un templo pagano de columnas y escalones extensos y poseía un asiento o un trono donde se representaba la majestad de Zeus, según los griegos, después fue llamado Júpiter por los romanos.
Los restos de esta edificación se llevaron en 1930 a Berlín, Alemania, fundándose el museo de Pérgamo, en el cual se guardan muchas cosas paganas. El altar de Zeus, según relata la descripción de la ciudad de Pérgamo, era considerado el trono de Satanás, tanto así, que cuando lo poseyó la Alemania de Hitler durante la segunda guerra mundial, existió entre los nazis un poder satánico para engañar y perseguir a muchos judíos y extranjeros.
Aunque la descripción de Pérgamo es simbólica, ya que es un mensaje al creyente Pérgamo, índica que todo creyente de este tipo esta en el sitio y trono donde mora Satanás, este no es nada más que el oscuro lugar de la mentira donde ejerce su poder que es en la mente. Por esta razón hay muchas religiones, dogmas entre evangélicos y protestantes, que lo establecen como obras y son una pérdida de tiempo o una herejía, ya que se interpreta la Palabra de Dios de manera irresponsable.
En este tiempo, había un varón de Dios en Pérgamo, cristiano, llamado Antipas, que se oponía a la idolatría y predicaba entre los gentiles. Este fue ejecutado por el imperio romano.
Existen muchos Antipas dentro de congregaciones de creyentes Pérgamo que no toleran la vanidad de los falsos líderes y falsos profetas, y además que no comparten y observan las injusticias de estos dentro de las congregaciones.
Balaam era un falso profeta que como no pudo complacer a Balac de los moabitas para maldecir a Israel por que Hashem le impedía hacerlo, entonces buscó la manera de que Israel cayera, aconsejando a Balac a engañar al ejército de Israel a incitarlos en el pecado de la fornicación y que adoraran ídolos mediante la influencia de mujeres moabitas y madianitas. De esta manera Balaam podía conseguir el pago y la complacencia de este rey.
El púlpito es utilizado como escondite para ocultar los intereses personales y complace en el pecado a sus seguidores, debido a que lo hace por conseguir el dinero a través de la manipulación, tal como lo enseñaba Balaam también.
Lo mismo hacen los falsos líderes o falsos profetas de este siglo, que engañan a la gente a complacerles en cualquier cosa y a decirles que todo está bien, sin importar la situación de la gente, solo por el interés de conseguir lo que quiere.
Finalmente, se tiene que el creyente Pérgamo retiene la doctrina de los nicolaítas, la misma que aborrece el creyente Éfeso. El nicolaismo, según Ireneo de Lyón, fue una doctrina creada por un tal Nicolás que según él, es el prosélito de Antioquía, cristiano gentil que aparece en el libro de Hechos (Hechos 6,5), cuando la manifestación del Espíritu Santo. Este se tergiversó del camino cuando ya los judíos habían abandonado la provincia romana por la persecución del gobierno romano, entonces estableció dogmas que no son bíblicos y no están conforme a lo establecido por Dios.
Así como los nicolaítas, hay creyentes Pérgamo, arrogantes, libertinos, se creen sacerdotes levitas, vaticanizan la iglesia y no se arrepienten de sus obras, ya que son sabios en su propia opinión y cuidan sus intereses. Son instrumentos de Satanás.
El que tiene la espada aguda de dos filos es Jesucristo y Él a través de sus ministros, los profetas de este tiempo, confirmarán lo profetizado por Él a sus discípulos.
En cuanto al nuevo nombre, todos recibimos en este mundo un nombre de identificación conforme a la actitud emocional de nuestros padres, pero en el Paraíso, el Reino de Cristo, recibiremos un nombre que nos identificará con lo que en verdad somos y es nombre de vida, tal como lo recibieron Abram, como Abraham y Jacob, como Israel. Esta es la esperanza de todos nosotros en ser Hijos de Dios llevando el único y verdadero evangelio de Cristo que es el evangelio del amor. Bendiciones a ustedes en el nombre de Yahshua Ha Mashiaj.